Enterada su abuela del cambio operado en su nieta, la quiere otra vez consigo, y así como fue allí donde recibió por primera vez al Señor, también allí encontró al que, dirigiendo su alma, la llevaría, por un camino recto.
Frecuentaba el castillo el abate Marthy, hombre de santidad e inteligencia superior; bajo su dirección, ordenó su vida, disipó sus incertidumbres y fundó la Congregación de la Sagrada Familia, que hermanaría la clausura con el apostolado vario y hermoso de la enseñanza, de la caridad, protección de jóvenes, cuidado de presos, etc.
Santa Emilia comenzó su apostolado entre las jóvenes de su edad, compañeras que la Providencia le deparó, y entre las cuales echó las primeras simientes de su congregación;” practicó la enseñanza de las niñas de pobres recursos alrededor de alguna enferma a la que iba a visitar; se compadeció de los sufrimientos y abandonos de los presos e influyó para que mejoraran de vida algunas jóvenes que se habían extraviado”.
Santa Emilia era guiada en oración por Jesús, esa unión a Jesús de manera perseverante la hizo un ser compasivo y lleno de misericordia con todos sus próximos.
De nuevo leer estos párrafos de la biografía de Sta. Emilia nos invita a pensar en nuestra sociedad. Solemos asociar al término “compasión” el sentimiento de lástima que a la vez lo vinculamos estrechamente con la caridad y que dista del verdadero sentido de la compasión.
Santa Emilia nos ayuda a adentrarnos en la profundidad de la palabra "Compasión" y podemos ir descubriendo que compasión es "hacernos cargo de lo que alguien, posiblemente muy cerca de nosotros, está viviendo, de lo que está padeciendo y caer en la cuenta de que, tal vez, necesita que tú estés “ahí”, a su lado. Por eso, Compasión no es solo sentimiento, sino también, y sobre todo, solidaridad”
Apoyados en la Palabra vemos que el texto del evangelio (Lucas 16, 19-31) dirige nuestra atención sobre el binomio compasión/indiferencia. La compasión constituye el "corazón" del mensaje de Jesús; la indiferencia, es la actitud más denunciada en el evangelio. Jesús es presentado a lo largo del evangelio, como "el que ve". Incluso en este caso, en el que los leprosos le habían hablado, el narrador no dice que Jesús los "escucha", sino que "los ve".Jesús-, nos revela con palabras y obras un corazón sensible y compasivo; que es lo opuesto a la indiferencia por temor o por ceguera.
¿Hacía dónde tenemos la mirada? ¿Qué vemos?
¿Hasta dónde llega nuestra solidaridad, nuestra compasión?
LECTURA SUGERIDA PARA EL VERANO
LIBRO EDITORIAL PPC Edición 2013 “JESÚS” Aproximación histórica.
«La compasión es el rasgo fundamental de Jesús y lo que puede hacer más creíble a la Iglesia» (JOSÉ ANTONIO PAGOLA SACERDOTE Y TEÓLOGO) Me interesa el hombre en que Dios se ha encarnado, cómo es, a quiénes se acerca, qué critica, cómo trata a la mujer, cómo desenmascara una determinada religión. Es la única forma que tengo de conocer a Dios. Si, Jesús es un hombre compasivo, que se acerca a los últimos, que busca la dignidad.
Sigue sus huellas
L.C.R.
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